domingo, 21 de noviembre de 2021

In Time

   “Ambientada en una sociedad futura. El hallazgo de una fórmula contra el envejecimiento trae consigo no sólo superpoblación, sino también la transformación del tiempo en moneda de cambio que permite sufragar tanto lujos como necesidades. Los ricos pueden vivir para siempre, pero los demás tendrán que negociar cada minuto de vida, y los pobres mueren jóvenes. Tras conseguir, por casualidad, una inmensa cantidad de tiempo, un joven obrero será perseguido por unos policías corruptos, "los guardianes del tiempo". En su huida, toma como rehén a una joven de familia adinerada”. Filmaffinity.

   “Para que algunos sean inmortales, otros tienen que morir”, o al menos eso reza una de las frases del diálogo de una de las mejores películas no de ciencia-ficción sino de economía. La fiel descripción del sistema financiero queda patente con la descripción gráfica de un mundo en el que el dinero físico ha sido sustituido por el tiempo como moneda, aunque bien podría parodiarse como el futuro dinero cripto. “El pobre muere y el rico no vive”, otra de las sentencias del film, reparte a la población en zonas separadas en función de la clase social a la que se pertenece, sin posibilidad alguna de tomar ningún ascensor social. Una sociedad dividida entre quienes lo poseen todo y viven en el lujo más asombroso, y los que lo hacen sumidos en la pobreza, la marginación y la violencia de las calles, se proyecta en la pantalla como un reflejo de la realidad misma que, cada vez más, se perfila como el futuro más inmediato.